Mi experiencia en Canyon Ranch
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En lo último de mi año 2022, tan agitado y afortunadamente con grandes viajes por el mundo. Mi último paso fue visitar el lujoso Resort Canyon Ranch en Tucson Arizona donde nos dedicamos solamente a disfrutar y recuperar energías.
Experimenta la alegría y la renovación en el centro de bienestar. Solo un día en Canyon Ranch en Tucson, puede levantar el ánimo y revitalizar la mente y el cuerpo.
Mi itinerario:
Día 1. Llegada a Tucson, Arizona
Tuvimos este viaje en diciembre, justo después del mundial de fútbol en Qatar, volamos en United Airlines y a nuestra llegada, el equipo de Canyon Ranch nos esperaba en el Aeropuerto Internacional de Tucson y nos trasladamos en un trayecto de 40 minutos aproximadamente.
Hicimos el registro donde nos dieron un paquete de bienvenida con una botella de agua y nuestra llave de la habitación. Elegimos la Ejecutiva con una Cama King, que tenía un pequeño escritorio para trabajar a distancia (¡siempre pendiente de mis viajeros!).
Día 2. Exploración de Canyon Ranch y Recreación
El amanecer de Tucson es otro tipo de paraíso. Los colores naranjas intensos se combinan con la melaza árida que crean el ambiente del oeste mágico.
Curiosamente al salir de mi habitación paso lo que a todo buen sureño mexicano, ¡traje la lluvia conmigo!
En tu cuarto te dejan el itinerario de actividades disponibles; desde las ya establecidas, como los eventos especiales en lo que puedes participar. De igual manera podrás entrar a todo el itinerario de manera digital a través de su app.
Para el desayuno elegí una entrada de yoghurt con fresas, frambuesas, blueberrys y un poco de chocolate para tomar energías, sumado a una tasa de café con leche.
El plato fuerte fue un pan con aguacate bañado en un huevo estrellado acompañado de papas en trocitos y algunos condimentos. Yo le agregue salsa tabasco para no perder el picor que estamos acostumbrados en México.
Y para soltarnos, entremos a la Clase de Hip Hop. En una de las salas de reactivación y acompañado de nuevas amistades, aprendimos la famosa canción de Usher. Una clase súper movida donde realmente me divertí y me la pasé muy bien.
Mi medio día tome paseo por el Resort, explorando todos los terrenos. Y lo mejor fue encontrarme con una pequeña manada de jabalíes. Incluso había una madre con sus dos crías. Me recordaron al puerquito valiente, Babe.
Por la tarde tomamos la Clase de Cocina con el Chef Shawn Brisby que muy amable, nos deleito con una demostración de su sopa de garbanzo…
Día 3. Paseo por la milla Canyon Ranch de Tucson
A la mañana siguiente elegimos la aventura por la milla exclusiva de Canyon Ranch. Un paseo para explorar los senderos desérticos, con algunos cactus de cientos de años y las montañas de fondo enmarcando un panorama asombroso.
Nos equiparon con una mochila, un termo con agua, un par de bastones para trekking y nos encaminamos en una van que nos llevaría a nuestro punto de partida.
Nos toco el Sendero del Oso #29, el cual empezaba con una subida leve hasta el Sabino Mountain. Pasábamos entre la maleza, nopales espinosos y cactus de más de 2 metros de altura. Lo curioso es que a pesar de ser un terreno árido, el clima era frío a fresco, haciendo más ameno el trekking.
Llegamos hasta un río que tenía cascadas, donde hace 100 años se contemplaba hacerse una presa de agua. Ahí tomamos un tiempo para descansar y merendar con algunas frutas y una tarta de vitamina B.
Finalmente regresamos por el mismo sendero hasta la carretera. Para mí fue lo mejor de este viaje; pude vivir la experiencia de disfrutar los paisajes que Tucson tiene y además con un clima perfecto.
Sin duda fue una vivencia diferente, conocí nuevas amistades y reafirme algunas cositas que debo tener en cuenta para cuidar mi salud. Cosas que planeo hacer el próximo año en mis propósitos del 2023, sobre todo para cuestiones de salud.